BioHackers: Ciencia en un Garaje
Posted on 26. Dec, 2008 by Luis A. Alcaraz in Actualidad.
Vía SmartBrief llego a este artículo que tengo que confesar que me ha dejado cuando menos sorprendido. Todos hemos oido historias de empresas que comienzan en un garaje y que acaban revolucionando algún aspecto de nuestro mundo. Pero normalmente, éstas son empresas del mundillo de la informática, donde con un ordenador y unas cuantas ideas brillantes se conseguían hacer maravillas. Lo que no me esperaba, es que esto llegara al terreno de la ingenería genética. Personas que se llaman a sí mismos biohackers y que practican la ciencia en sus propias casas, alejados de los laboratorios convencionales.
El hecho de que ahora en Internet se pueda encontrar protocolos para prácticamente cualquier cosa, ha hecho que un grupo de gente intente crear sus propios organismos genéticamente modificados en sus propias casas.Incluso hay una organización que pretende crear un laboratorio donde estos científicos “amateurs” puedan usar equipamiento y reactivos químicos. En el artículo ponen un par de ejemplos de personas que han podido construirse un laboratorio relativamente barato en sus casas, con aparatos en algunos casos fabricados por ellos mismos y empleando protocolos y técnicas que ya se usaban en los 70.
En realidad, lo de montarse un laboratorio en la propia casa no es algo tan nuevo. A lo largo de la historia son varios los científicos que se han visto obligados en cierta medida a hacerlo. Quizá uno de los más conocidos es Santiago Ramón y Cajal, que pagó de su propio bolsillo su primer microscopio y montó en su casa un pequeño laboratorio de histología.
Sin embargo, tengo que ser escéptico y cauto ante lo que se habla en el artículo. La mayor diferencia entre Ramón y Cajal y esto es la preparación. El primero pasó una vida estudiando y dedicado a la medicina, no siemplemente leyendo cosas aquí y allá en algunas ocasiones de dudosa procedencia. Además, hay que ser muy cauto con el trabajo de laboratorio. Un mal uso puede ser muy peligroso tanto para la persona que realiza los experimentos como para aquellos que les rodean, por lo que en muchas ocasiones no basta con aprander las cosas leyéndolas en Internet, si no que hay que recibir la formación adecuada.
Me parece perfecto que el público en general se interese por la ingeniería genética o cualquier rama de la ciencia, pero creo que no es algo para andar jugando. Si de verdad te interesa, estudia y luego trabaja en un laboratorio. Es cierto que en muchas ocasiones no es fácil llegar a eso, pero no debería justificar el crear un laboratorio en casa. Además, si ya en muchas ocasiones es difícil que un experimento salga en las condiciones controladas de un labortatorio, no me quiero ni imaginar lo que sería en un garaje. Quizá los esfuerzos de DIYbio estarían mejor centrados en que realmente la gente tenga facilidades para acceder a una carrera científica, y no en animar a que la gente lo haga en sus propias casas. Quizá Apple salió de un garaje, pero dudo mucho que empersas biotecnológicas como Lilly, Roche o Monsanto pudieran haber nacido en esas condiciones.
Fotografía | phdstudent.
2 Responses to “BioHackers: Ciencia en un Garaje”
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Curiosa noticia. Comparto contigo las preocupaciones que comentas, aunque tampoco veo tan mal que alguien monte un laboratorio en su casa en plan aficionado, el caso de Ramon y Cajal que comentas o el de Mendel en su invernadero del convento no andan tan lejos. Pienso que tomando ciertas precauciones y realizando experimentos exentos de riesgos podría crearse una bonita y educativa aficción. Aprovecho para desearte un feliz año
Hola Juanan.
Feliz año para ti también! Gracias por tu comentario. Como dices, no es tan malo que alguien se monte un laboratorio en su casa, siempre y cuando tengan la formación adecuad. No me refiero en sí a que tengan una carrera, pero sí que sepan algo más que simplemente haber leído un par de howto sobre transgénicos.