Test genético previo para un fármaco anti-VIH
Posted on 25. Jul, 2008 by Luis A. Alcaraz in Farmacogenómica, Medicina Personalizada.
Poco a poco la Medicina Personalizada va tomando importancia en el tratamiento de enfermedades, especialmente aquellas graves en las que el fármaco en cuestión es muy agresivo. Nuestros genes determinan muchos aspectos de nuestra vida, y uno de ellos es la respuesta a los fármacos. De momento, son pocos los casos en los que se ha encontrado una relación directa entre la respuesta a un medicamento y la dotación genética, pero sin duda será un de los campos que más veremos evolucionar en los próximos años.
El último ejemplo lo tenemos con Abacavir (Ziagen), un fármaco desarrollado por GlaxoSmithKlin. La FDA recomienda realizar un test genético antes de administrar este fármaco, dado que una variación en un gen relacionado con el sistema inmune aumenta el riesgo de sufrir una reacción alérgica severa. Esta reacción se identifica por la aparición de diversos síntomas (nausea, vómito, diarrea, dolor abdominal, etc.) y puede llegar a poner en peligro la vida del paciente. Además, la reacción de hipersensibilidad puede aparecer cuando se administra el fármaco por primera vez, o cuando se retoma el tratamiento tras un periodo de descanso.
En un estudio publicado en la revista New England Journal of Medicine se demuestra que usando este test genético, el porcentaje de afectados por la reacción hipersensibilidad baja del 7,8% al 3,4%. De este estudio se deduce que las personas portadoras de la mutación tienen más de 60% de probabilidades de sufrir esta reacción, frente al 4% de la población sin la mutación. Se estima que sólo el 5% de las personas poseen esta mutación. Parece ser que para la realización de este estudio, GlaxoSmithKlin prestó toda la ayuda necesaria, lo cual les honra.
El fármaco también está siendo investigado porque puede estar relacionado con un aumento en la incidencia de ataques al corazón. Los datos obtenidos hasta ahora son contradictorios y no aportan nada claro.
Visto en The New York Times.
Foto de cabecera por bobobao.